Filosofía, Metapolítica, Aforismo, Poesía.

miércoles, 19 de octubre de 2016

Enemigos del placer .. Enemigos de la espontaneidad .. Enemigos de la realidad.

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La nueva izquierda ya nos tiene acostumbrados a sus ocurrencias, a sus magufadas y a sus circos. Cada día nos salen con una nueva idea de bombero, y hace tiempo que nos preguntamos si carecen por completo de sentido del ridículo o si es que están tan encantados de conocerse a sí mismos, y tan arropados por un público incapaz de cuestionar ni una coma de su discurso, que se crecen.. y se crecen.. hasta que finalmente logran coronar todas las cumbres de la vergüenza ajena. 

Creo que el evento que pasamos a comentar a continuación va a ser, en este sentido, una marca difícil de superar. Reproduzco a tal efecto las reflexiones que Beatriz Gimeno, número tres por Podemos en la Comunidad de Madrid, realiza en torno al mismo. 
Espero poder estar en la presentación el día 19 porque estoy trabajando este mismo tema desde el punto de vista no gay, sino feminista y heterosexual. Me interesa mucho el culo masculino como lugar de la vergüenza y como espacio altamente simbólico donde se concentra la pasividad entendida como feminización (degradante) y como lugar de placer inasumible para los hombres heterosexuales. La penetración anal o vaginal tiene importantes significados simbólicos en torno a los cuales se concentra una parte importantísima del discurso sexual patriarcal especialmente en lo que hace referencia a la feminidad/pasividad (impotencia) y masculinidad/actividad (agencia, potencia) Y, sin embargo, el ano es una de las principales zonas erógenas para hombres y mujeres, pero especialmente para los hombres. Estoy convencida, cada vez más, que para que se produzca un verdadero cambio cultural tienen que cambiar también las prácticas sexuales hegemónicas y heteronormativas y que sin ese cambio, que afecta a lo simbólico y a la construcción de las subjetividades, no se producirá un verdadero cambio social que iguale a hombres y mujeres.

Sabía que la Gimeno tenía que andar detrás de esto. Huelga decir que mientras estos “talleres” sean voluntarios, cada cual puede perder (o no) el tiempo como más le plazca y creer en las soplapolleces que le dé la gana. Ahora, no estaría igual de tranquilo si esta sujeta tuviera acceso al BOE. De hecho, en la Comunidad de Madrid ya ha participado de un proceso legislativo que arroja no pocas sombras.

Como ya habré dicho otras veces, estamos ante una nueva especie de puritanismo. Este ya no te dice que todo placer sexual es malo: tan sólo el principal de ellos, o el preferido por la mayoría. La penetración vaginal es expresión del patriarcado, y por tanto hay que combatirla y sustituirla por “otras formas de placer”. Pero lo más llamativo es que no sólo se pretende desalentar las prácticas sexuales más habituales para sustituírlas por otras cualesquiera, sino que también se nos pretende orientar “moralmente” en esa sustitución, promoviendo prácticas concretas como la penetración de la mujer al hombre mediante, claro está, un dildo. 

Nos vemos obligados a analizar esto por partes (nunca mejor dicho). Lo primero que yo percibo es una clara intención revanchista: “hay que hacerle sentir al varón lo que es ser penetrado” … “que aprenda a ser el elemento pasivo y la mujer el activo”. Lo cual, más allá de la bajeza o inmadurez del sentimiento que motiva la idea, me lleva a preguntarme hasta qué punto no implica sacrificar el placer en aras de una impostura ideológica; porque, seamos sinceros, ¿cuántos hombres disfrutan siendo penetrados analmente?; y más importante aún: ¿cuántas mujeres obtienen genuíno placer de una práctica en que, por más que sean ellas protagonistas y parte activa, no están igual de presentes ni activas sus zonas erógenas? 

Repito: para quien guste de esas prácticas y le resulten placenteras, perfecto. Pero la mayoría de la gente disfruta con las “prácticas patriarcales”, y esto es lo que desaprueba y pretende reorientar la señora Gimeno. 

Luego hay una contradicción implícita, y muy llamativa, entre la idea de “deconstruir la masculinidad” mediante el descubrimiento del placer anal y aquella otra de que la orientación sexual de un sujeto no tiene nada que ver con la forma en que obtenga placer, cosa que suscribo, puesto que creer que uno se “vuelve homosexual” o “menos masculino” por disfrutar de ciertas zonas erógenas es propio de un total catetismo en materia sexual.

¿Cómo conciliar, entonces, ambas ideas? Pues de ninguna forma. El discurso de Beatriz Gimeno y los suyos es pura contradicción, pura inconsistencia. Hablando en plata, tienen un cacao en la cabeza de no te menées (por ser generosos y no hablar de otras sustancias de la misma coloración).
¿No estaremos confundiendo el símbolo con lo representado? ¿También deberemos
"problematizar" el acto de masticar por ser un "símbolo de agresividad",
o el de orinar, por ser un símbolo de "marcaje territorial del macho"?
¿De verdad creen que el camino más corto, o más sencillo, o más efectivo para lograr la igualdad entre hombres y mujeres en los distintos ámbitos es modificar sus hábitos sexuales y convertir el que venía siendo un espacio para la desinhibición y la entrega a tu pareja en una clase práctica de moral o política sexual, en un experimento o una representación teatral de dudoso potencial recreativo? 

Este nuevo puritanismo, este nuevo moralismo, este fascismo rosa quiere meternos la política, literalmente, hasta en los lugares más recónditos.
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4 comentarios:

  1. Entiendela, pobre criatura. Debe ser duro vivir en un mundo donde todo te es hostil. La naturaleza, mal que les pese, parece bastante machista. Y también bastante agresiva, aunque animalistas, veganos y ecoridis quieran ver en ella a una benevolente madre gaia. Asi que en fin, a parte de ser anticapitalistas y antisistema, tienen que ejercer de enemigos de la realidad, lo que debe ser jodido...

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    1. Buena síntesis, Alejandro Sueiras. Lo único que cuestiono es que la Naturaleza sea "machista", aunque está claro que lo es según el concepto de "machismo" que maneja esta gente.

      Un saludo.

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  2. ojala te violen gil culiao¡¡ jurai que teni el oyo sagrao¡¡ si una mina te mete el dedo en el culo seguro te senti maricon y le dejai un ojo morado¡¡¡ me dio cancer leerte basura de mierda¡¡

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